Aquí no estaba el límite!

Ya estoy de vuelta en casa después de un domingo de ciclista montañero en La Rioja para contar como ha salido todo.
El sábado después de comer quedé con Cristian y Javi, un compañero suyo del mountain bike para salir hacia allí y descansar esa noche en una casa rural cerca de donde se daba la salida. Ellos están ya curtidos en esto del mtb y yo iba un poco a verlas venir por lo que me dieron muchísimos consejos que me serían muy útiles después. La verdad es que yo en esto soy un auténtico novato.

Llegamos sobre la 7 de la tarde para recoger los dorsales y lo primero que me llamó la atención fue la diferencia de ambiente con el triatlón. No me parece uno mejor que otro, simplemente son diferentes. En mountain bike, por lo menos en la prueba que yo he visto, la gente va por grupos, la mayoría son gente que llevan muchos años, intentan disfrutar de todo lo que envuelve a su deporte y la mayoría tienen como objetivo acabar la carrera.
Una vez recogido el dorsal y el regalo (unas gafas muy guapas) nos tomamos algo disfrutando del ambiente previo a la carrera con el la gente del equipo de Cristian y después a nuestra casa a descansar, no sin antes salir 40 minutuillos a activar las piernas en la bici. En cuanto a la casa rural, muy acogedora.

Nos despertamos sobre las 7 para desayunar, ducharnos e ir tirando. Al final llegamos con el tiempo justo pero todo salio corréctamente y de repente me ví allí, solo y a la vez rodeado de montones de ciclistas, pedaleando a las 9 de la mañana con un calor que ya se me hacía duro, con la comida en la garganta y con 73km por delante que habría que superar uno por uno, sin saber que ritmo llevar e intentando ante todo no caerme.
La carrera comenzaba con un puerto que duraba unos 45 minutos aproximádamente y en el que no fui nada cómodo, creo que por la tensión que me producía el pensar en el aquel terreno en el que íbamos de uno en uno. Una vez llegamos arriba ya me relajé y después de bajar por piedras como mi habilidad me deja, me empecé a encontar muy bien y en el segundo puerto me dediqué a pasar gente llegando al primer avituallamiento, en el kilometro 24, con la moral muy alta. Sin embargo todavía faltaban casi 50km y el sol cada vez pegaba con más fuerza, no sabía lo que me esperaba. El camino seguía con constantes repechos y bajaditas con terrenos todos ellos muy secos y con piedras donde me me llegué a equivocar de camino por una subida infernal de unos 100 metros y tuve que volver al ver desde arriba que la gente iba por otro lado.
En el kilómetro 32 comenzaba un puerto de unos 10km donde vino el hombre del mazo. Este llegó sobre el 37 creo que en forma de deshidratación, a pesar de haber estado bebiendo bastante y me costó mucho llegar a la cima. Subí a unos 5km/h y únicamente pensaba en retirarme pero no había muchas vías de escape. El sol en mi cabeza, un silencio absoluto, mi respiración y yo sufriendo como un perro, a ratos ni siquiera era yo el que pedaleaba y pregunté a uno cuanto quedaba para coronar. ¡ En un km hay avituallamiento! Siiiiiii!  Llegué como pude y paré unos 10 minutos a beber, comer, beber, beber y beber.Todo el mundo bremeando y yo no podía ni hablar. Me explicaron que quedaban dos subidas, una de 8 y una de 4. Ya llevaba 2h 30minutos y eso iba costar pero no había escapatoria asi que palante.Sentía esa sensación que suelo tener de que mis pulmones sólo tienen cierto recorrido y si respiro más toso como un loco, insoportable. Cogí mi ritmito suave y tipi-tapa tipi-tapa pasando largos kilometros en forma de demonio hasta el 64 donde un chaval me dijo "todo bajada!", muchas gracias chaval y de repente entramos en un sendero guapísimo del que no pude disfrutar por que no tenía ni brazos.
Entré en meta exhausto y a la vez contentísimo, no pude comer en dos horas debido al esfuerzo pero daba igual, había acabado aquello en 4h y 49 minutos. Encima me dice Cristian que soy el 197 de 540, ¿en serío? me compadezco de los que estan por llegar todavía. Además 6º de 12 en mi categoría. Esto es lo más duro que he corrido hasta hoy, seguro.

Javi, Cristian y yo

La experiencia fue muy buena y el mundo del mtb me llama cada día un poco más. Seguro que repito pero igual en algo mas corto que esta fue demasiado larga para mis pobres piernas.
Ahora toca vuelta a la vida real que el sábado correré en Aritzaleku el triatlón sprint y como es el último, habrá que machacar.