Muchas cosas que contar y poco tiempo para hacerlo. Lo primero de todo y antes de que se me olvide me gustaría agradecer a todo el mundo por el interés mostrado sobre la clasificación de turbopeces, todo un éxito la verdad.
Y ahora a lo que vamos, fin de semana en casa para disfrutar como un enano tras la sesión de fisio de la semana pasada. La última vez que escribí en el blog andaba preocupado por mi pierna que no estaba en perfectas condiciones. Acudí al fisio de la universidad el miércoles pasado y el resultado fué muy positivo, no me dijo nada de la tibia y tan solo se trataba de un gemelo sobrecargdo. Nada que no pueda arreglarse con dos sesiones y un parón en el ritmo de carrera a pié que terminarán este miércoles. Espero que tenga razón y en breve pueda disfrutar de correr en condiciones. Aún así, esto ha supuesto tener que acabar con esta primera parte de la temporada de forma prematura y saltarme dos competiciones que iban a suponer la guinda del pastel pero es lo que hay, ya he comido algunas guindas cuando iba deborando la tarta.
¿Y qué pasa ahora? Pues toca encajar las últimas piezas del puzzle para que todo salga según lo esperado en la época de competiciones. Estas piezas se llaman bicicleta y gimnasio. Tengo un rompecabezas incompleto donde se puede apreciar una parte bastante bien terminada pero en la que es difícil adivinar lo que muestra la imagen. ¿Cómo es esto? Mi temporada está dividida en dos partes cada una con su base, desarrollo y competición. He ido poniendo las piezas de natación y carrera a pié cuidadósamente utilizando la bicicleta únicamente durante los 2 primeros meses (buen tiempo) para crear la base y ahora toca darle la impotancia que se merece. Además, no soy una persona que tenga especial fuerza por lo que pienso que el tabajo en el gimnasio puede traer grandes beneficios.
Segúramente sea la disciplina que más me gusta y habrá que intentar hacer las cosas bien. Hay varios factores que contribuyen a que sea tiempo de ciclimo. El primero es que viene el buen tiempo además del cambio de hora que con tantas ganas espero. En segundo lugar, no tengo clases y puedo distribuir mi trabajo en el proyecto "más o menos", lo que es muy beneficioso a la hora de salir a pedalear. El último motivo para ponerme con al bici es un motivo mental y es que este fin de semana, contra todo pronóstico salí a la Bilbao-Bilbao, lo que me ha devuelto muchas ganas de bicicleta que aquí cuesta mantener.
Mañana escribiré la crónica sobre la marcha en la que disfruté como un enano (hacía tiempo que no disfrutaba de esta forma, me gusta mucho el ciclismo y la buena compañía) pero adelanto que las sensaciones fueron muy muy buenas y muy muy malas. Ya os lo explicaré.
Un abrazo!
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